Proceso de reciclaje de los plásticos

El reciclaje de plásticos es una necesidad urgente para el futuro de nuestro planeta. Este proceso cuenta con varias etapas que garantizan la reutilización de los plásticos de manera eficiente. 

Desde Plasticol, estamos comprometidos con ofrecer soluciones plásticas ecoamigables. Hoy te queremos explicar cómo se recicla el plástico, cada paso del proceso y sus beneficios ambientales ¡Sigue leyendo! 

 

¿Cuál es el proceso de reciclado del plástico? 

 

El proceso de reciclaje de plástico incluye varias fases que aseguran que los plásticos desechados se puedan reutilizar de manera efectiva. Cada uno de estos pasos es importante para convertir los residuos en nuevos productos, reducir la cantidad de desechos y conservar los recursos naturales. 

 

Recepción de las materias primas 

El primer paso en el proceso de reciclaje de plástico es la recepción de las materias primas. Los plásticos recolectados se transportan a las instalaciones de reciclaje. Aquí se registran, pesan y almacenan temporalmente antes de pasar a la siguiente fase. 

 Hoy en día, hay numerosas campañas de concienciación pública que aumentan la cantidad de los plásticos recolectados. Esta etapa inicial garantiza que todo el material sea contabilizado y preparado adecuadamente para el proceso posterior. 

 

Proceso de selección 

Una vez que se reciben, el siguiente paso es el proceso de selección. Este es uno de los pasos del reciclaje de plástico más importantes, ya que clasifica los materiales según su tipo y calidad. 

Los plásticos se separan manualmente o mediante sistemas automatizados de clasificación que utilizan tecnología como la identificación por infrarrojos, los separadores de aire y las corrientes de Foucault. 

En esta selección se asegura que solo los plásticos adecuados sean reciclados, mejorando así la eficiencia del proceso. 

 

Triturado 

Los plásticos seleccionados se pasan por máquinas de triturado que los convierten en pequeños fragmentos. 

Algunas instalaciones incluyen una fase de pretritruado para los plásticos más grandes o más gruesos, lo que asegura que el material esté en el tamaño adecuado para un triturado más fino. 

Este procedimiento facilita el tratamiento posterior del plástico, ya que reduce el tamaño del material y aumenta su superficie. 

 

Lavado 

Después del triturado, los pequeños fragmentos se someten a un proceso de lavado. El objetivo de este paso es eliminar cualquier contaminantes, como etiquetas, pegamentos, residuos de alimentos y otros materiales no deseados. 

El lavado se realiza en varias etapas, que emplean agua y agentes limpiadores específicos. El resultado es un plástico limpio y listo para ser reciclado en nuevas formas. 

Las instalaciones más avanzadas cuentan con sistemas de reciclaje de agua para minimizar el consumo de recursos. 

 

Secado y centrifugado 

Una vez lavado, el plástico se debe secar para eliminar la humedad. En esta etapa, se usa equipo de secado y centrifugado para confirmar que el material esté completamente seco antes de continuar con el proceso. 

Un buen secado previene problemas en los próximos procedimientos, como la formación de burbujas o la degradación del material, y verifica la calidad del producto final. 

 

Homogeneización 

El último paso en el proceso de reciclaje de plástico es la homogeneización. Aquí, los fragmentos de plástico se funden y se mezclan uniformemente para formar una masa homogénea. 

La homogeneización puede incluir la adición de aditivos para mejorar la resistencia UV, la flexibilidad o la durabilidad del plástico. 

La masa resultante se suele extruir en pellets, que son las materias primas utilizadas para fabricar nuevos productos plásticos. 

 

Beneficios del reciclado de los plásticos 

 

El reciclaje plástico ofrece numerosos beneficios ambientales y económicos. Al reciclar plástico se reduce la cantidad de desechos en el medio ambiente. 

A continuación, os detallamos las ventajas más significativas del reciclado de plásticos. 

 

Reducción de la contaminación 

Este proceso reduce significativamente la contaminación ambiental. Los plásticos que no se reciclan terminan en vertederos, océanos y otros ecosistemas, donde tardan cientos de años en degradarse. 

Al reciclar, evitamos que estos materiales dañen la vida silvestre, los hábitats naturales y las fuentes de agua. 

También, se minimiza la acumulación de microplásticos que pueden entrar en la cadena alimenticia y afectar a la salud humana. 

 

Conservación de recursos 

El petróleo y el gas natural son recursos naturales valiosos que se utilizan para fabricar plásticos nuevos. Cada tonelada de plástico reciclado ahorra aproximadamente 16,3 barriles de petróleo. 

Cuando reutilizamos los plásticos existentes, reducimos la demanda de extracción y procesamiento de nuevas materias primas, lo que contribuye a preservar los recursos naturales y a mantener un equilibrio ecológico. 

 

Reducción de emisiones 

La producción de plástico nuevo a partir de materias primas genera más emisiones de gases de efecto invernadero que el reciclaje. 

Con este proceso se disminuye la huella de carbono asociada con la producción de plásticos, ya que se liberan menos emisiones de CO2 y otros gases dañinos a la atmósfera. 

Se estima que el reciclaje de una tonelada de plástico evita la emisión de aproximadamente 1,5 toneladas de CO2. 

 

Ahorro de energía 

El proceso de reciclaje de plástico ahorra entre un 50% y un 70% de la energía necesaria para producir plástico virgen. 

Este ahorro energético reduce los costos operativos y disminuye la dependencia de combustibles fósiles, lo que promueve una gestión energética más sostenible. 

 

Reducción de la extracción de recursos naturales 

La producción de plásticos nuevos implica la extracción de petróleo, un proceso que tiene graves impactos ambientales: destrucción de hábitats, contaminación del aire y el agua, y generación de residuos tóxicos. 

Al reciclar, protegemos los ecosistemas y fomentamos un uso más racional sobre los recursos disponibles. 

También, esta práctica disminuye los conflictos sociales asociados con la minería y la perforación de petróleo. 

 

Creación de empleo 

La industria del reciclaje plástico crea puestos de trabajo más allá de las plantas de reciclaje, como los relacionados con el transporte y la investigación en tecnología asociada al reciclado. 

Se estima que por cada 10.000 toneladas de plástico reciclado se pueden crear 36 empleos en la industria del reciclaje. De igual modo, si la demanda de productos reciclados aumenta, pueden aparecer nuevas empresas que generen aún más oportunidades de empleo. 

 

Compromiso de Plasticol con el medio ambiente  

 

El proceso de reciclaje de plástico es necesario para reducir la contaminación, conservar los recursos naturales, disminuir emisiones y ahorrar energía. Cada paso, desde la recepción de las materias primas hasta la homogeneización, tiene su importancia en la transformación de los desechos plásticos en recursos nuevos. 

En Plasticol, con más de 40 años de experiencia en la inyección de termoplásticos, implementamos programas de reciclaje interno y desarrollamos productos plásticos sostenibles. 

Si buscas soluciones de calidad en la inyección de plásticos, somos tu socio indicado.

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